Parece que, poco a poco, la crisis sanitaria provocada por el coronavirus va remitiendo. Pero el camino a la normalidad va a ser largo y complejo. De hecho, la cuarta conferencia de presidentes autonómicos y Pedro Sánchez se centró en decidir cómo y dónde aislar a los positivos asintomáticos en las próximas semanas.
Tal y como anunció el presidente de España, la comunidad científica ha aconsejado solicitar listados de infraestructuras públicas y privadas donde estos pacientes podrían aislarse una vez que den positivo con los test rápidos que se van a realizar. Para ello, Sánchez pidió a los presidentes autonómicos un listado de hoteles y polideportivos o palacios de congresos que puedan reunir unas condiciones mínimas de confort e higiene para albergar a estos pacientes.
«Para empezar a salir tienes que estar sano y no contagiar, y si un asintomático positivo vuelve a su casa, puede contagiar a su familia», recalcó el presidente. Pero para no tener que recurrir a decretar un nuevo estado de alarma, el Gobierno prevé que esta reclusión se haga de forma voluntaria, si bien consideran que no será difícil convencer a estas personas para no contagiar así al resto de su familia.
Aun así, el ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska no cerró la puerta a estudiar todas las posibilidades legales necesarias «para garantizar la salud pública de todos los españoles».
En definitiva, según vayan haciéndose más test, los positivos se van a ir multiplicando. Es la única forma de ir, poco a poco, volviendo a la normalidad laboral y económica del país. Pero algunos hoteles no podrán reactivar su negocio y tendrán que seguir prestando este servicio extraordinario de acoger a personas asintomáticas, pero que hayan dado positivo, con el objetivo de erradicar totalmente el virus.