¿Qué tendencias afectarán al futuro de la industria de viajes? MSC Cruceros ha publicado el informe The Future of the Guest Experience, creado en colaboración con The Future Laboratory, donde identifica cómo las marcas de viajes y alojamiento tendrán que ofrecer experiencias de ultra alta definición (UHD) para satisfacer las necesidades del pasajero del futuro.
El informe muestra que, el futuro de la industria de los viajes en general, y de los cruceros en particular, influido por la hiperconectividad, el desarrollo urbano y la transformación demográfica, está lleno de desafíos y, especialmente, de oportunidades.
El lujo será hiperlujoso, los spas serán aún más revitalizantes, el entretenimiento será 5D y aún más avanzado, y los viajes con un propósito cobrarán gran importancia. Los pasajeros del futuro valorarán la fluidez, la libertad y la diversidad cultural mientras buscan el descubrimiento y la superación personal. Las marcas de viajes tendrán que responder proporcionando experiencias que impacten en la mentalidad de los pasajeros, ayudándoles a crecer y progresar.
Experiencia personalizada
Los pasajeros del futuro buscarán una experiencia vacacional realmente personalizada y, a medida que la sociedad vaya conectándose más que nunca, la tecnología proporcionará a las empresas la orientación necesaria para adaptar las experiencias a cada individuo.
El informe demuestra que la tendencia de las Data ID Wallets permitirá a las marcas crear una experiencia al cliente muy dinámica, fluida e hiperpersonalizada. Los cruceros, hoteles y resorts se convertirán en puntos de contacto de datos, evaluando el comportamiento de consumo de los viajeros para informarles mejor sobre su oferta de servicios. Asimismo, los asistentes de inteligencia artificial y los dispositivos portátiles seguirán desempeñando un papel importante para satisfacer las necesidades de los clientes.
En este sentido, MSC Cruceros apuesta ya por ZOE, el primer asistente de crucero personal virtual del mundo, que se introdujo a bordo en marzo de 2019. Actualmente disponible en siete idiomas y con más en desarrollo, ZOE evolucionará para convertirse en una parte integral de la experiencia del pasajero, anticipando las necesidades y adaptando la información de acuerdo con sus preferencias.
Diseño subconsciente…
Esta tecnología también será clave para la tendencia del Diseño Subconsciente, donde las tecnologías receptivas modificarán sin problemas los entornos según los estados de ánimo y emociones de los huéspedes o pasajeros.
La habitación o el camarote del futuro podría contar con sensores de señal biológica capaces de rastrear las frecuencias cardíacas y la expresión facial, ajustando la luz y la temperatura para un mayor confort. También, los materiales inteligentes podrían actuar como arte vivo, cambiando para crear un entorno visualmente inmersivo alineado con el estado emocional del cliente.
Al mismo tiempo, la hiperconectividad también llevará a las personas a buscar una conexión social para evitar la deshumanización. Por ello, cobrará especial valor el entretenimiento centrado en las personas que coloca al individuo en el corazón del espectáculo, accesible para todas las edades, géneros y nacionalidades. Impulsada por un mundo hiperconectado que hace que los viajes sean más accesibles, esta tendencia verá cómo el entretenimiento derriba las barreras geográficas, culturales y demográficas.
Al mismo tiempo, los viajeros se vuelven cada vez más conscientes del impacto ambiental de sus viajes y buscan opciones de vacaciones ecológicas. Por ello, la experiencia del huésped de 2030 se centrará significativamente en la sostenibilidad, el impacto social y el compromiso cívico.
Recuperar lugares abandonados
Por último, el deseo de viajar con un propósito también verá el incremento de Resorts Reconvertidos, donde las marcas relacionadas con el turismo transformarán espacios deshabitados o abandonados, impulsando las economías locales al convertirlos en destinos únicos.
Ocean Cay MSC Marine Reserve, en Las Bahamas, es un ejemplo de uno de estos destinos. MSC Cruceros ha trabajado para transformar un antiguo lugar industrial de excavación de arena en un destino ecológico para sus clientes. La isla ha sido desarrollada para crear un impacto positivo a largo plazo, tanto en términos de medio ambiente, como de las comunidades locales de las Bahamas.
La isla ocupa 100 kilómetros cuadrados de aguas protegidas y la visión es transformar estas aguas en una próspera y floreciente reserva marina. Se creará un biocentro en la isla para llevar a cabo una investigación crítica sobre la salud y restauración de los corales y se están realizando planes para desarrollar una asociación académica con la Universidad de las Bahamas.
Ocean Cay también ha creado un impacto económico positivo con la restauración de la isla mediante el abastecimiento local de materiales, cuando ha sido posible, contratando bahameños durante la construcción, y, más a largo plazo, también el personal que vive y trabaja en la isla incluye empleados bahameños a tiempo completo.
Con la próxima década definida por la búsqueda de personalización por parte de los consumidores, el deseo de convivencia intercultural y la demanda de una experiencia orientada a un fin, las marcas que ofrezcan estos tres frentes pueden crear una experiencia para el cliente que será realmente de ultra alta definición.
Imágenes cedidas: Octavian Rosca en Unsplash
