Si vuestra empresa utiliza un sistema de Business Intelligence y está meditando complementarlo a su vez con una plataforma de Mobile Intelligence, aquí os introduzco algunas situaciones habituales en el día a día de las empresas que pueden ayudaros a comprender mejor las posibilidades que este nuevo entorno puede generar a vuestro negocio.
En primer lugar, imaginemos cuántos de nuestros empleados no están frente a un ordenador en este momento. ¿Qué porcentaje del personal de la empresa representan? Seguramente uno bastante elevado. Todos ellos están quedando al margen de información actualizada a tiempo real referente a sus obligaciones u objetivos, y de posibles decisiones o seguimientos necesarios para reorientar su trabajo o el de su equipo responsable. Ahora una banalidad, ¿cuántos de estos trabajadores que no están frente a un ordenador llevan en su bolsillo un Smartphone? Es evidente que prácticamente su totalidad, por lo tanto podríamos disponer de una máxima conectividad y capacidad de información y decisión al instante entre todos los trabajadores de nuestra empresa que consideremos necesarios.
Si con los ejemplos que explicaremos a continuación no os queda claro, os dejo también información sobre el momento en que una empresa puede necesitar Mobile Intelligence.
El caso más directo que nos puede venir a la mente es el de nuestro equipo de ventas o agentes comerciales. La necesidad de movilidad entre este perfil de trabajador acostumbra a ser muy elevada por las numerosas reuniones y negociaciones que generan en nombre de la empresa. A través de nuestra plataforma de Business Intelligence podemos realizar un forecast de ventas o revisar el vigente, pero es posible que necesitemos actualizarlo y comentarlo durante una reunión con según qué clientes. No basta con que la información sea reciente, debe ser precisa y en real-time.
En base a ello podrá proyectar un presupuesto completamente personalizado para cada visita o reunión que se realice, maximizando así el margen o rédito que pueda sacar la empresa de ello a su vez, y gestionando las debilidades o puntos de mejora en cada caso.
Otra situación podría relacionarse con los costes de stock, en concreto en lo referente a la gestión de inventarios desde un almacén. Las personas encargadas de controlar estos aspectos deberían poder acceder a la información sobre los volúmenes de stock en tiempo real para poder contabilizar y confirmar los diferentes productos. Con esto podemos prevenir rupturas de stock antes de que salten alarmas o bien añadir servicios de utilidad a las labores de supervisión. Por ejemplo, con el reconocimiento óptico de las cámaras digitales o scanners podríamos incorporar nuevos productos y referencias al almacén a medida que se van cargando para su almacenamiento de forma que realizaríamos dos tareas que, de otro modo, deberían hacerse de forma independiente.
Finalmente, podríamos encontrar otro caso práctico de utilidad del Business Intelligence para un supervisor o jefe de tienda. En tal caso podría necesitar argumentos para respaldar el descenso de las hojas de reclamaciones en el último periodo tras una visita inesperada de un superior, cliente o proveedor. También podría querer complementar esta información a su vez con un informe acerca de las encuestas realizadas en la tienda a los clientes o cruzarlas con otros métodos de satisfacción de compra para resaltar que están por encima de la media de tiendas de la región.
Aplicando estas situaciones al sector turístico por ejemplo, podríamos obtener unos resultados visibles y directos que compenetraran y mantuvieran informados a todos los empleados de un hotel o cadena hotelera.
Desde la óptica del hotel, podríamos tener un sistema de alarmas vinculado a nuestro BI a través de la cual saltaran a ciertos niveles para tomar decisiones o aplicar medidas. ¿El stock de bebidas del bar del hotel está por debajo de lo recomendable? ¿Las quejas de los clientes en un día sobrepasan la media estimada? ¿El servicio de lavandería tiene una demora no planificada en su entrega?
Como director de un hotel también podríamos necesitar acceder en cualquier parte a informes sobre el cumplimiento de los objetivos y las diferentes áreas que trata nuestro cuadro de mando integral de cara a una reunión con los inversores. ¿Alguna consulta no prevista? ¿Podemos repasar mientras desayunamos la previsión de ocupación del fin de semana? ¿Estamos a tiempo de aplicar alguna campaña de captación?
Internamente puede ser una forma de incentivar a los trabajadores, permitiendo la extracción de datos referentes a informes de objetivos o bonus de equipo. ¿Lo hacemos mejor que otro hotel de la misma cadena? ¿Tenemos tiempos de espera menores en la recepción de nuestros clientes? Compitamos por la excelencia: ¿Han bajado las incidencias por encima de la media de los hoteles de la zona de la cadena? ¿Y del país? ¿Estamos al nivel de otros países en productividad?
La gestión de la información dependerá de cómo se quiere integrar a los propios empleados en la toma de decisiones y la transparencia de los datos. Ahora bien, muchos expertos arrojan conclusiones positivas sobre la retención del talento y el engagement de tus empleados cuanto más clara tengan la información que les atañe y mayores sean los retos que tiene a su alcance.
Otras muchas aplicaciones interesantes son las que podríamos derivar de la geolocalización a través de los sistemas GPS, estas las dejo a vuestra imaginación porque a buen seguro que os surgen muchas e interesantes ideas por vuestra cuenta.
Imagen Móviles y Tierra vía Shutterstock.
—————————————————————-
Roger Llorens es licenciado en Administración y Dirección de empresas por la Universidad Autònoma de Barcelona, completando sus estudios en la Linnaeus University de Suecia. Especializado en Marketing Online desde 2008, ha trabajado como diseñador de proyectos de posicionamiento web (SEO y Marketing de Contenidos), campañas en redes sociales para empresas y pymes (SMO – SMM) y estrategia online corporativa y comunicativa para varias empresas y startups.
Imágenes cedidas: Shutterstock
